Porfirio Gutiérrez nació y creció en una comunidad textilmente rica en Oaxaca, México. Con su trabajo Gutiérrez está tejiendo juntos la historia, el arte, la cultura y la tradición.
Para el artista y tejedor Zapoteco Porfirio Gutiérrez, el color es un canal para conectarse con la forma de vida de sus ancestros.
Creció inmerso en el color, rodeado por la voluptuosidad de las montañas Oaxaqueñas y por el conocimiento de las plantas curativas y de su uso para hacer pigmentos. Su trabajo de vida ha sido dedicarse a revitalizar y preservar técnicas tradicionales Zapotecas de teñido con un enfoque en reinterpretar los textiles y materiales tradicionales para reflejar su propia visión creativa.
En cuanto a su residencia divide su tiempo de trabajo entre Ventura, California y Oaxaca. La práctica artística de Gutiérrez mantiene la creencia de sus ancestros de ver a la naturaleza como un ser vivo, sagrado y divino. Sus bases en el conocimiento tradicional Zapoteca se manifiesta en sus textiles, reinterpretando el lenguaje tejido tradicional, subvirtiendo y reimaginando los símbolos y las formas, transformando sus diseños textiles hacia figuras fractales y espacios arquitectónicos y el movimiento que ve en las ciudades y en los entornos urbanos.
Gutiérrez es un verdadero artista Americano, moviéndose libremente a través de las fronteras impuestas entre sus dos países, como sus ancestros y muchas otras personas indígenas lo han hecho durante miles de años. Sus diseños nacen profundamente de su experiencia de vivir dos culturas, de moverse entre lo tradicional y lo moderno pero siempre dependiendo del conocimiento profundo y las dimensiones espirituales de su trabajo.